- 8 enero, 2013
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- Márketing, WA Arquitectura Corporativa, WA Interiorismo Corporativo
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Nuestro estudio de arquitectura en Barcelona ha estado llevando a cabo una revisión de los últimos proyectos realizados, tras más de 20 años de experiencia en construcción, estamos preparados para mirar atrás y analizar las características comunes que encontramos en nuestros proyectos.
Desde nuestros primeros proyectos residenciales hasta nuestros destacados hoteles de la ciudad de Barcelona, siempre hemos mantenido una estrecha relación con nuestros clientes, con el objetivo de luchar contra sus amenazas y cumplir sus requerimientos. Hemos tenido que entender las necesidades del cliente para conseguir entregar el mejor proyecto para él y para su empresa, una resolución constante que involucra al cliente en nuestro proceso creativo y le permite percibir la importancia de lo que un buen diseño puede hacer por sus objetivos de negocio.
Como arquitectos barceloneses, nuestros diseños siempre se han inspirado en la arquitectura de la ciudad, un panorama claramente marcado por dos notables momentos durante varios siglos de historia. El primero es lo que se suele conocer como el Gótico Catalán, un peculiar y muy austero estilo que creó en la ciudad una de las más bellas iglesias de la arquitectura universal: Santa María del Mar. El segundo, periodo arquitectónico catalán y en especial para la ciudad de Barcelona, llamado Modernisme, que nos dejó como legado las contribuciones de grandes nombres como Gaudí, Domenech i Muntaner, Jujol and grandes obras como La Pedrera, el Palau de la Música o el Templo de la Sagrada Família, pero también una colección de incontables edificios anónimos, fachadas y comercios diseñados con una alta calidad arquitectónica por artistas modernistas.
Esta escena nos ha ayudado a conseguir la inspiración para llevar a cabo nuestros proyectos más significativos, como el Hotel Ayre o nuestro más reciente Hotel Picasso donde hemos tenido en cuenta las preexistencias históricas de nuestros alrededores creando arquitecturas que de forma natural emergen del paso del tiempo con puntos comunes en sus enfoques, procesos y resultados.
Tras veinte años de trabajo, podemos definirnos como arquitectos autóctonos de Barcelona declarando las características comunes de nuestros edificios como una arquitectura estrechamente ligada al estilo propio catalán pero que tiene asimismo la voluntad de integrar influencias arquitectónicas del exterior. Proyectos que evitan el protagonismo y se disuelven en su entorno utilizando los materiales como herramienta fundamental de expresión.
También nos preocupamos por las personas que van a habitar nuestros edificios, así que diseñamos una arquitectura útil y confortable para sus moradores. Y en los últimos años preocupándonos por el medio ambiente, definiendo una economía de recursos sin intención de exhibirnos sino declarándonos responsables y conscientes de nuestra contribución como arquitectos a la sostenibilidad del planeta.
Y finalmente, definimos nuestra arquitectura como una experimentación, un proceso de creación en cada proyecto, basado en el rigor y la constancia como una respuesta coherente a un mundo en constante cambio.
Imágenes: Hall interior del Hotel Ayre; Terraza en la cubierta del Hotel Ayre; Fachada del Hotel Picasso